domingo, 6 de julio de 2008

Tríptico de la Adoración de los Magos restaurado


Tríptico de La Adoración de los Magos

Vista general del Tríptico, una vez restaurado.
El Tríptico de la Adoración de los Magos es un retablo tardogótico, de finales del siglo XV – principios del XVI, que combina la carpintería y talla de madera dorada y policromada, con la pintura al óleo de las puertas. Su autoría se atribuye al maestro de Covarrubias. Estuvo, en origen, en la capilla de los Santos Reyes Magos, que pertenecía a los García de Covarrubias. Hoy se expone en el museo de la colegiata, al lado de la sacristía.
Detalle de la Virgen antes de la resturación.
La madera de la caja estaba afectada por el ataque de insectos, lo que mermó su resistencia. La manipulación de las puertas había ocasionado pérdidas de policromía y soporte, roces y abrasiones. Las tallas presentaban pequeñas pérdidas de volumen. En la policromía, estaban muy degradados por la humedad y los gases del ambiente el pigmento azul ultramar y el pan de plata. Las pinturas de las tablas tenían algunas grietas y fisuras y, en las escenas inferiores había cúmulos de cera de las velas y quemaduras. En la cara exterior de los batientes los daños eran más serios. Además, los barnices de protección habían amarilleado y el polvo se acumulaba en los intersticios de las tallas.La Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León aprovechó la restauración para estudiar en profundidad el tríptico, especialmente algunas técnicas, como las lacas coloreadas y los brocados aplicados, que no son comunes. La intervención incluyó también el uso de la reflectografía de infrarrojos, una tecnología de vanguardia útil para estudiar los dibujos subyacentes en las pinturas exteriores de las puertas. Primero se desmontó el retablo, se tomaron muestras y se analizaron.
Detalle de la Virgen despues de la restauración
Luego el proceso pasó por el tratamiento antixilófagos; la reintegración del soporte para garantizar la estabilidad; la limpieza, conservación y reintegración de la policromía; la protección final y el montaje de nuevo. Mientras duraron los trabajos, la Fundación del Patrimonio Histórico organizó una exposición por la que pasaron más de 5.000 personas y que mostraba, pieza a pieza, el Tríptico de la Adoración de los Reyes Magos y desvelaba los pormenores del proceso de restauración y las imágenes subyacentes que aparecieron bajo las pinturas de las puertas laterales.

sábado, 5 de julio de 2008

82.000 € MUESTRA LA BELLEZA ORIGINAL DEL TRIPTICO DE COVARRUBIAS


La Fundación del Patrimonio Histórico entrega la pieza recuperada a la Colegiata de San Cosme. La actuación se ha aprovechado para estudiar dibujos a través de infrarrojos

Una inversión de 82.000 euros ha permitido devolver al Tríptico de la Epifanía de Covarrubias su belleza original y mostrar al público el proceso de restauración que se ha seguido en esta obra. Los trabajos se han prolongado durante casi un año y han corrido a cargo de los técnicos de la Fundación del Patrimonio Histórico, entidad que ha financiado el 80% del coste de la actuación, mientras que del 20% restante se ha encargado la parroquia de la villa rachela.El presidente de la Fundación del Patrimonio, José Ignacio Mijangos, entregó ayer la obra a la Colegiata. La restauración se inició en junio del año pasado con la realización de los estudios previos. La intervención se ha aprovechado para estudiar las técnicas especiales aplicadas en el retablo, así como los dibujos adyacentes de sus puertas, que han sido analizados con infrarrojos. Este proceso, explicaron fuentes de la entidad, ha permitido documentar un dibujo que confirma que la intención del autor, Gil de Siloé, era pintar La Anunciación, que se vería con el retablo cerrado. Finalmente, no lo hizo pero acabó de pintar en grisalla a la Virgen.La restauración se ha realizado en un taller habilitado en la Colegiata. El proceso de recuperación incluyó el tratamiento antixilófagos; la reintegración del soporte; la limpieza, conservación y reintegración de la policromía; la protección general y el montaje final. Toda esta transformación ha podido ser contemplado por el público gracias a una exposición organizada en la propia Colegiata.pieza a pieza. Más de 5.000 personas han visitado la muestra en la que se mostraba el Tríptico pieza por pieza. Las cinco tallas de la escena central se expusieron en distintas fases de los trabajos. A estas piezas y a las dos puertas les acompañaban fotografías que reflejaban las catas, el proceso de limpieza o el repinte de la obra. «El objeto de esta exposición ha sido desvelar in situ las distintas fases por las que pasa un bien durante el proceso de restauración», comentaron fuentes del organismo regional.El Tríptico de la Epifanía se encontraba en origen en la capilla de los Santos Reyes Magos, que pertenecía a los García de Covarrubias. Hoy en día se expone en el museo de la Colegiata, al lado de la sacristía. La obra, de finales del siglo XV y principios del XVI, se encontraba bastante deteriorada. La madera de la caja estaba afectada por el ataque de insectos y la pérdida de la policromía se reflejaba en las puertas debido a su manipulación. Las tallas tenían pérdidas de volumen y las tablas mostraban algunas grietas y fisuras. Los técnicos de la Fundación han puesto freno a ese deterioro y han recuperado la pieza después de casi un año de trabajo.